
James Reece (Chris Pratt) es un miembro Navy SEAL del ejército cuyo pelotón sufre una emboscada durante una misión encubierta de alto riesgo. Cuando Reece regresa a casa con su familia, cuestiona su propia culpabilidad con recuerdos confusos del suceso. Sin embargo, a medida que sale a la luz nuevas evidencias, Reece descubre fuerzas oscuras trabajando en su contra. Para averiguar qué sucedió Reece contará con el antiguo compañero Edwards (Taylor Kitsch), con conexiones con la CIA.