
Neve se horroriza al descubrir que ella misma está muerta. Al darse cuenta de que la gente no puede verla, observa cómo sus amigos y familiares se preocupan porque no ha vuelto a casa después de la fiesta de anoche y forman grupos de búsqueda para peinar el bosque para encontrarla. Neve cuida su maltrecho cuerpo, lava la sangre de su nuca y se cambia la ropa sucia. No tiene ningún recuerdo de anoche.